Bilbao Basket 79-67 Real Madrid (13-04-2022) - El pespunte

Hubo Llull y nada más.

Cuando no es cosa de un sólo jugador, cuando no vale la buena imagen frente al actual mejor (impagable financieramente) equipo de Europa, cuando las salidas no se notan, ni por ausencia ni por clima de acción, cuando nada funciona, cuando la canasta se convierte en una enana blanca... pues toca narrar otra derrota.

Esta vez contra Bilbao, al que habíamos ganado 27 de 36 veces, y nada menos que por +34 la última que chocamos.

Como siempre en esta época, era día de aniversarios de ligas y copas que adornan nuestros recuerdos. Pero sólo Llull, que venía de su propio récord, firmó números razonables. https://twitter.com/ACBCOM/status/1513800428701597699

De entrada parecía un partido ajustado más. Sergi tiraba del colectivo (rápidamente se ponía en 14 puntos) y el marcador reflejaba tiras y aflojas, hasta un primer 22-18 de cuarto inicial https://twitter.com/ACBCOM/status/1514296884168376325

El Real Madrid estaba en partido y nos poníamos por delante en ocasiones, sin despegar nunca (31-33 tras la canasta de arriba, por ejemplo). Cuatro abajo al final del segundo cuarto, 45-41, en un segmento empatado

Que el último cuarto se nos podía atragantar lo pudimos prever con el lamentable inicio tras el parón. 12-1, que como homenaje a Malta ya nos venía valiendo https://twitter.com/MovistarBasket/status/1514306673464197126

Tuvimos un último momento de inspiración con un parcial 0-10 con el que el equipo terminaba adecentando el final del tercer cuarto 60-55.

Y vino el cuarto de los horrores de inicio. No habíamos cogido una pelota cuando ya perdíamos de 10. Con el 75-61 ya veíamos desesperado a Laso en el banquillo, chillando con uno de sus ayudantes que aguantaba el chaparrón. En la pista, Deck se tiraba una sandía como nos la tiraríamos tú y yo después de una farra con Heurtel: ni llegaba al aro. Poca mejor metáfora de lo poco que jugamos de ahí al final. < p style="text-align: justify;">Tampoco ellos machacaron, 79-67 y a seguir. 12 puntos el Madrid en el último cuarto, ese en el que nuestros jugadores se convierten en jugadores de softball, por suavitos, o qué se yo. Ya cualquiera empieza a dudar en qué posición acabaremos la liga regular, algo impensable hace un mes.